Este artículo abarca la relación que puede existir entre el sistema linfático del cuerpo, los ganglios linfáticos que lo componen y el diagnóstico del cáncer de mama, dado que este tipo de cáncer a menudo se extiende primero hacia los ganglios linfáticos ubicados debajo del brazo. Determinar si los ganglios linfáticos presentan células cancerosas es una parte esencial del proceso de diagnóstico del cáncer de mama. El estado de los ganglios linfáticos ayuda a los médicos a determinar la etapa del cáncer y a su vez, determinar el mejor tratamiento.

El sistema linfático

El sistema linfático es una parte esencial del sistema inmunológico, que ayuda a combatir infecciones u otras enfermedades. Este sistema está compuesto por una red de vasos que drenan el fluido conocido como linfa, un líquido blanquecino / amarillento que contiene glóbulos blancos (linfocitos), proteínas y algunos glóbulos rojos, dentro de los ganglios linfáticos, largos conductos que contienen fluido linfático y órganos especializados que participan en el sistema inmunitario. Los ganglios linfáticos y órganos eliminan a los organismos invasores o células anormales del líquido linfático, permitiendo que el cuerpo combata estos agentes nocivos.

Los ganglios linfáticos

Los ganglios linfáticos, que tienen la forma aproximada de un fríjol, se encuentran conectados por vasos. Normalmente forman grupos en las axilas, a cada lado del cuello y en la ingle. Su función principal es filtrar la linfa, cualquier fluido absorbido por el sistema linfático pasa a través de al menos un nodo linfático antes de volver a la circulación.

Los ganglios contienen linfocitos (células blancas de la sangre), que ayudan a destruir las bacterias extrañas u otras células dañinas. Durante una infección pueden aumentar de tamaño o inflamarse, ya que deben producir células blancas adicionales. En ocasiones, los vasos linfáticos se hacen visibles formando líneas rojas muy finas a lo largo de una extremidad, como resultado de una infección (conocido como linfangitis). Los ganglios linfáticos también pueden hincharse debido a la formación de un absceso (bolsa llena de pus) en los nodos o a la presencia de células cancerosas.

¿Qué son los ganglios mamarios?

Un bulto en el pecho es, en términos médicos, un nódulo mamario, un bulto o tumoración en la mama, palpable que puede ser doloroso. Este síntoma es un motivo muy frecuente de consulta al médico. Cuando estos nódulos están relacionados con cáncer de mama, los primeros afectados son los ganglios mamarios que se encuentran ubicados en la región axilar. Por lo tanto, los especialistas tienen la función de determinar si estos ganglios linfáticos presentan células cancerosas. En caso afirmativo, la condición de los ganglios mamarios le permitirá al médico determinar, en qué etapa de desarrollo se encuentra el cáncer y cuál es el tratamiento más adecuado.

La importancia de los ganglios linfáticos para la estadificación del cáncer de mama

Si los ganglios linfáticos contienen células cancerosas constituye un factor importante para la estadificación del cáncer de mama, la determinación del tratamiento y la predicción de la supervivencia. Aunque el cáncer de mama tiene el potencial de propagarse a otras regiones del cuerpo por primera vez, con mayor frecuencia se extiende hacia los ganglios linfáticos de las axilas. Esto se conoce como difusión regional. A partir de ahí, el cáncer de mama puede hacer metástasis (diseminación) de manera sistemática hacia otras zonas del cuerpo, como los huesos, el hígado, los pulmones o el cerebro.

Cuando una mujer es diagnosticada con cáncer de mama invasivo (cáncer que ha invadido más allá de la pared del conducto de la mama o el lóbulo y el tejido circundante del seno), es necesario examinar los ganglios linfáticos axilares para determinar si también contienen cáncer. Más; ¿Cómo se propaga el cáncer hacia los ganglios linfáticos?

El cáncer de mama no invasivo: las células cancerosas están confinadas a los conductos y no invaden el tejido graso y conectivo circundante de la mama. El carcinoma ductal in situ es la forma más común de cáncer de mama no invasivo (90%). El carcinoma lobular in situ es menos frecuente y se considera un marcador de mayor riesgo para el cáncer de mama.

El cáncer de mama invasivo: las células cancerosas atraviesan la pared ductal y lobular e invaden la grasa y el tejido conectivo circundante de la mama. El cáncer puede ser invasivo sin hacer metástasis (diseminación) hacia los ganglios linfáticos u otros órganos.

Determinar si los ganglios linfáticos están libres de cáncer o no, es una parte esencial del proceso de estadificación del cáncer de mama, así como ayuda a determinar el tratamiento y el pronóstico.

Estadificación del cáncer de mama

Estadíos         Tamaño del tumor    Ganglios linfáticos involucrados      Metástasis 
I                        Menos de 2 cm                                 No                                                      No
II                       Entre 2-5 cm                                     No                                                      No
III                      Más de 5 cm                  Sí, en el mismo lado del pecho                        No
IV                      No aplicable                                No aplicable                                            Sí

La manera estándar para examinar los ganglios linfáticos es realizar una disección de los ganglios axilares. Este procedimiento a menudo se realiza durante la misma operación que una lumpectomía o mastectomía, consiste en la extirpación de 10 a 30 ganglios linfáticos para su examen patológico bajo el microscopio. El efecto secundario más común de una disección de los ganglios axilares es el linfedema (hinchazón crónica) del brazo, que puede afectar hasta el 10% de los pacientes. El linfedema se presenta cuando el proceso normal de drenaje linfático del brazo se rompe o se bloquea, haciendo que el líquido se acumule en el brazo.

Otra opción quirúrgica llamada biopsia del ganglio centinela se utiliza en algunos pacientes con cáncer de mama para determinar si el cáncer de mama está presente en los ganglios linfáticos. Si el ganglio(s)  centinela resulta canceroso, por lo general se lleva a cabo una disección de ganglio axilar completa.

Existen algunas señales que permiten valorar la probabilidad de que un ganglio linfático agrandado sea o no benigno. Por ejemplo, si un nódulo linfático mide menos de un centímetro de diámetro y es suave, gomoso y tierno, es más probable que la inflamación se deba a una causa benigna. No obstante, muchos médicos creen que un paciente que ha sido diagnosticado con cáncer de mama, por lo general debe ser prudente y someterse a una biopsia si existe algún ganglio inflamado que persista más allá de un mes o dos, ya que este puede contener células cancerosas.

Hacer ejercicio después de una mastectomía y la extracción de ganglios linfáticos

Es importante que cada paciente consulte con su médico cuándo es seguro comenzar a hacer ejercicio y utilizar el brazo del lado de la cirugía tras una mastectomía. Si bien no existen contraindicaciones para realizar cualquier número de ejercicios después de la plena recuperación, hay ciertas precauciones que se deben tomar, especialmente aquellos que han tenido la disección de los ganglios linfáticos de la zona.

Cualquier lesión menor en la piel en el lado de la mastectomía puede infectarse con más facilidad que una lesión en el otro brazo. Esto se debe a que los vasos linfáticos se han interrumpido y los ganglios linfáticos se han eliminado, dejando el brazo más vulnerable a los organismos invasores, tales como bacterias. Muchas mujeres que se han sometido a una mastectomía y una disección ganglionar axilar experimentan inflamación en el brazo y reportan una mayor incidencia de irritación o traumatismos menores de la piel. Además, en los casos en que se han eliminado 30 ganglios linfáticos o más puede existir un mayor riesgo de trombosis de la vena axilar, ya que los ganglios normalmente están localizados cerca de los vasos sanguíneos y la inevitable cicatrización de la cirugía puede atar, torcer o estrechar los vasos sanguíneos, haciéndolos más susceptible al daño.

Los médicos recomiendan combinar el ejercicio del brazo con períodos de descanso, manteniéndolo elevado por encima del nivel del corazón durante unas pocas horas, para evitar la hinchazón indebida. Los pacientes de mastectomía deben tener cuidado de no ejercer demasiada intensidad con el fin de evitar lesiones evitables. Algo positivo del ejercicio en estos casos es que el uso regular de los músculos después de una mastectomía mantendrá las articulaciones flexibles, estirará y suavizará el tejido cicatrizal, ayudará a abrir nuevos vasos linfáticos y promoverá el flujo de sangre, reduciendo la formación de coágulos.